Este artículo pretende abordar el estado de las democracias en este periodo de transición que se está produciendo desde principios del siglo XXI, acompañado de grandes cambios en todos los ámbitos, no sólo en el comportamiento de los estados, sino también en la sociedad civil. Analizaremos la importancia de la transparencia para el fortalecimiento de las democracias modernas, especialmente en las democracias latinoamericanas y de la Unión Europea, así como el respeto al Estado de Derecho, que se han visto algo influenciados por el auge del populismo en ambos continentes. Con una mirada crítica, examinaremos el surgimiento de un nuevo orden democrático, con repercusiones que podrían transformar conceptos que se daban por sentados hace más de siete décadas.